Con varios proyectos gráficos compartidos —y años de amistad— estar con Rafael es un placer. Rafael es un autor. Desde libros hasta posavasos, cada trabajo revela su sensibilidad; una alimentada de múltiples referencias que provienen del arte, de la arquitectura, de los objetos de diseño, de la moda, de la música o de la cultura popular; la misma sensibilidad que iguala en calidad a su espléndida cocina.
El bar del restaurante Rafael es uno de los mejores lugares para estar y es uno de mis lugares favoritos.